Blogia
tresemes

Defectos de 400€: Sigma 18-125 OS

Defectos de 400€: Sigma 18-125 OS

Tresemes punto blogia punto com renace con cosillas sobre fotografía.

Se ha convertido en mi última y cara pasión desde que dejé de escribir aquí y abrí mi Flickr.

Los primeros artículos, muy a mi pesar, van a tratar de dos defectos que me he encontrado en sendas lentes en las que me he dejado mi mísero sueldo de estudiante: Front focus y decentering, términos en un inglés con toque pedantillo que se resumen en una expresión: Putadas de 400€.

Sigma es mundialmente conocida por dos cosas: La primera es que fabrica equipos y lentes compatibles para todas las marcas y la segunda es que la mitad de ellos no funcionan correctamente. La semana pasada me compré un Sigma 18-125 OS, un objetivo "todo terreno" que necesitaba imperiosamente por estar harto de que el 18-55 IS siempre se me quedase corto.

El bichejo en cuestión

Ligero, bonito, estabilizado y con 28-200mm equivalentes:una pasada para vagos amateurs como yo.

 

Primero hice lo que se hace con estas cosas, montarlo en la cámara y salir cinco minutos a la calle a afotar todo lo susceptible de ser afotado. Lo cierto es que no me disgustaron los resultados, mis perros posaron como sólo ellos saben hacerlo (cualquiera que visite mi galería Flickr podrá comprobarlo) y las fotos salían tan nítidas como cabría esperar, pero... ¿Realmente el objetivo lo estaba dando todo de sí?

Aquella fue una buena pregunta así que me puse a hacer lo segundo que se suele hacer con estas cosas: las pruebas de enfoque. La prueba en cuestión es bien sencilla, no hay más que coger dos objetos similares y colocar uno al lado del otro y unos 5 o 10 mm por detrás... en este caso: dos pilas; una vez hecho esto seleccionamos el punto central de enfoque de nuestra réflex por ser el más preciso, ponemos el objetivo a la máxima focal y mayor apertura, enfocamos a la pila de detrás y disparamos... ¡Click!

 

 

En este caso la pila más retrasada, a la que yo enfoqué, es la de la derecha. Veámoslo de cerca, al 100%:

 

 

¡Tachán! La pila de la izquierda sale bastante más nítida que la de la derecha. A esto, queridos y escasos lectores, se le llama front-focus, es decir, el objetivo tiende a enfocar ligeramente más cerca de lo que debería. Si hubiese sido al revés (enfoque en la pila más cercana y nitidez en la más lejana) tendríamos un caso de back-focus. Aquí la misma prueba pero con dos libros (enfocando al libro de arriba):

 

 

Al 100%

 

 

En mi caso, y si se ve en pequeñito, no es muy exagerado y la escasa abertura máxima (f/5.6) ayuda a esconder este fallo de autofoco; pero el defecto es más que evidente y no mola nada así que he decidido devolverlo a su isla natal (el objetivo lo compré vía online) para que me lo cambien por otro.

La tienda en cuestión se ha comprometido a enviar esta unidad defectuosa y la nueva a testear para cerciorarse de que el nuevo objetivo que me mande no tenga el mismo defecto, si cumple con su palabra y el próximo objetivo me llega en buen estado se va a llevar un artículo muy positivo en el blog... si me acuerdo.

La próxima entrada tratará sobre mi querido Sigma 10-20 HSM y su peculiar defecto de descentrado...

0 comentarios